19.3.19


Día 4/12 | Nidhivan y Radha Raman

Siguiendo al Maestro | Peregrinación Holi Vrindavan 2019




El día comenzó, como siempre, con la oración de la mañana, a la que asistió Guruji, solo para decidir que todos juntos realizaríamos el abhishekam de Giridhari más tarde por la noche.

Después de que terminaron las oraciones de la mañana, los devotos asistieron a su tercera clase de la Academia Bhakti Marga con Swami Revatikaanta. Habló acerca del Leela de Giridhari, enfatizando varios versos claves y brindando una visión de los paralelos que podrían ser traídos a nuestras propias vidas con Guruji. Contó sobre el desafío de Krishna a Nanda Maharaj, la nueva resolución de Nanda de adorar Govardhan en lugar de Indra y la consecuente ira de Indra. Todo esto llevó al acto de misericordia de Krishna, salvando a todos al levantar la colina de Govardhan con Su dedo meñique, brindando refugio a todos. Al igual que Giridhari, Guruji ofrece Su refugio y protección a todos los que están dispuestos a aceptarlo, pero debemos ser lo suficientemente inteligentes como para comprender que la tormenta mortal de Indra se desata diariamente en la forma del mundo material de Maya, esperando ansiosamente que nos atrape. Entendiendo esto, nunca debemos dejar el refugio del Maestro Espiritual y estar siempre agradecidos por Su continua protección.

Después de la clase, Swami Revatikaanta se dirigió a un grupo de posibles devotos iniciados durante casi una hora, explicando en profundidad las reglas y los principios de un devoto. ¡Si todo va bien, tendremos varios iniciados al final de la peregrinación!

Después de que el satsang llegó a su fin, almorzamos rápidamente y luego salimos para nuestro programa de la tarde, que comenzó con un viaje a Nidhivan. Guruji se unió al grupo hacia el final de la visita, momento en el que muchos en el grupo habían sido ya ‘atacados’ por los colores de Holi. Guruji pasó algunos momentos profundos contemplando el bosque místico donde se dice que el Raas Leela se vuelve a representar cada noche, hasta hoy en día. Los árboles se transforman en Krishna y Sus gopis y bailan hasta la luz de la mañana, sin ser perturbados por ninguna criatura viviente.

Después de Nidhivan, el grupo se dirigió al templo Radha Raman, hogar de la famosa deidad que pertenecía a Gopal Bhatta Goswami. El grupo llegó justo antes de la hora de apertura y rápidamente se llenó a tope el templo casi vacío con nuestro grupo de 500. ¡Fue realmente un espectáculo para la vista! Las cortinas se abrieron en breve para un rápido Darshan alrededor de las 5:30 pm, pero luego se cerraron una vez más, solo para volver a abrirse a las 6:30 pm. Mientras esperábamos, Guruji fue a reunirse con Abhishek Goswami, uno de los descendientes de la familia de Gopal Bhatta, que sirve y cuida el templo de Radha Raman. Organizaron que Abhishekji visitara Giridhar Dham más tarde durante la semana para dar una conferencia sobre Draupadi, ¡algo que todos estamos deseando! Mientras tanto, los devotos mecían el templo con un kirtan fuerte y vibrante. El grupo cantó y bailó durante casi una hora, culminando con el arati y el glorioso darshan de Sri Radha Raman cuando las cortinas se abrieron una vez más.

Después del maravilloso tiempo que pasamos en Radha Raman, el grupo regresó a Sri Giridhar Dham. Una pareja de devotos de Varanasi tenía una fiesta de compromiso y estaban dispuestos para comenzar sus actuaciones realizando la Guru Puja directamente a Guruji, algo que Guruji había aceptado amablemente. Después de que se completara la puja, comenzó el Abhishekam de Giridhari. Una vez más, todos los devotos pudieron verter agua y ofrecer flores a Giridhariji.

Después de las oraciones, Guruji decidió cenar con la gente en una de las tiendas de alimentos. ¡Se hicieron arreglos, y Guruji se sentó y comió, distribuyendo gran cantidad de Maha Prasad a todos los presentes al final de Su comida! Un hermoso final para otro maravilloso día de peregrinación en el Santo Dham.

¡Permaneced atentos para más mensajes mientras nosotros “Seguimos al Maestro” en una peregrinación a lo Divino!

¡Jai Gurudev!



















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